9 diciembre 17. Para el Grupo Popular la situación de La Manga del Mar Menor está llegando a un estado límite. ``Los dos años y medio del Gobierno municipal ha paralizado las labores de mantenimiento de esta zona del litoral cartagenero y ha agravado problemas como la falta de limpieza o el apagado del alumbrado público´´, ha denunciado la concejal Carolina Palazón.
A esto hay que añadir la falta de control por parte del Gobierno sobre la situación de la actual junta directiva que preside la asociación de vecinos de La Manga.`` Teniendo conocimiento del informe de la Federación de asociaciones donde se aclara que dicha junta fue constituida de manera irregular sin cumplir los estatutos, el Gobierno mira para otro lado y deja en manos de una asociación ilegal el uso del local social, propiedad municipal, y la organización de sus actividades´´, ha manifestado Palazón.
Tras numerosas quejas por parte de los vecinos, y habiendo preguntado durante el pasado Pleno al Gobierno sobre esta situación, los vecinos siguen esperando una solución. ``Los vecinos ya se quedaron sin las tradicionales fiestas de septiembre y ahora tienen miedo de que ocurra lo mismo con las actividades de Navidad’’, ha añadido Palazón.
Palazón ha lamentado que a todo esto se añade la falta de inversión para dinamizar una zona del municipio que necesita un mayor esfuerzo por parte del Ayuntamiento. Hay que recordar que este año no se ha incluido ningún proyecto dentro de los presupuestos participativos, es decir, una zona de gran importancia a nivel turística para Cartagena, no tendrá ni una sola inversión para el año 2018. Ni mejoras, ni promoción turística ni iniciativas que permitan dar un impulso a La Manga del Mar menor.
La concejal popular ha dicho que`` podemos decir alto y claro que La Manga es la gran olvidada del Gobierno municipal. Ni mantienen, ni invierten y lo que es peor, aquello que funcionaba lo desecharon sin ningún motivo justificado´´. En este sentido, Palazón ha hecho referencia al Imsel, un organismo que permitía cuidar los municipios de la costa durante los 365 días del año y que el Gobierno eliminó por una pataleta.
Los vecinos de la manga tienen los mismos derechos que el resto de la ciudadanía de Cartagena y el Gobierno debe ser consciente que apostar por La Manga supone generar economía, consolidar el turismo de sol y playa y crear puestos de trabajo que no beneficiarán solo a quienes vienen en esta zona del litoral sino a todos los habitantes del municipio y de la comarca.