La alcaldesa exige acelerar la conexión al Corredor Mediterráneo y mantenerlo a salvo de los recortes por los pactos de investidura

La alcaldesa, Noelia Arroyo, ha exigido al Gobierno de España que acelere la conexión de Cartagena al Corredor Mediterráneo y mantener esta inversión a salvo de los recortes presupuestarios que derivarán de los pactos de investidura. Así lo ha defendido Arroyo en el VII Acto Empresarial por el Corredor Mediterráneo, celebrado este jueves 16 de noviembre en Madrid, que ha congregado a empresarios y representantes de la sociedad civil española al grito de #QuieroCorredor.

Arroyo espera que “las facturas de Sánchez con el independentismo” no supongan más retrasos a las infraestructuras básicas de España como el Corredor Mediterráneo, y ha puesto como ejemplo que “solo la deuda de 15.000 millones que Sánchez va a perdonar pagaría 20 veces el AVE entre Cartagena y Murcia. De hecho, con esos 15.000 millones que ya no veremos se podría construir una línea de AVE directa entre Cartagena y La Coruña”.

La alcaldesa ha recordado que este año acabaremos con un retraso injustificable en la definición del proyecto de integración del AVE en Cartagena, “pero seguimos a la espera de que se defina la bifurcación exclusiva para mercancías que debe conectar el puerto con el corredor Mediterráneo, a través de la ZAL de Los Camachos”.

Para Arroyo, esa falta de definición ha venido siendo una excusa para retrasar las inversiones en el resto de la línea. Un retraso sin ningún sentido, asegura la alcaldesa, porque “nunca se ha discutido que la plataforma de alta velocidad iría por el mismo trayecto que la línea actual”.

Es por eso, que la alcaldesa ha exigido que, una vez definido el modelo de integración de la alta velocidad en Cartagena, se aceleren las inversiones para no perder el tren de los fondos europeos. “Es urgente definir la bifurcación de las mercancías, es urgente contratar la obra en todo el trayecto desde Riquelme y, por supuesto, la opción de integración a la ciudad debe transformarse ya en proyecto y pronto en obra para no perder la oportunidad de financiarla con fondos europeos”.

Arroyo ha destacado la importancia que tiene para Cartagena la conexión al Corredor Mediterráneo, ya que “representa mucho más que para la mayoría de las ciudades”. Unirnos al Corredor Mediterráneo supone, según Arroyo, abrir el puerto de Cartagena a los mercados de Asia y del Norte de Europa y unir Cartagena a los emisores turísticos del centro de Europa.

Para lograrlo, asegura, “hay que impulsar los dos proyectos complementarios y esenciales, como son Barlomar y la ZAL de Los Camachos”.

La alcaldesa también ha exigido la modernización del transporte ferroviario entre las dos principales ciudades de la región, y ha reclamado la conexión directa con Madrid por Chinchilla.

“El soterramiento del AVE en Murcia ha sido usado como una justificación para eliminar la conexión directa de Cartagena con Madrid por ferrocarril. Es el camino más corto entre nuestro puerto y el centro de la península, y el camino más corto entre los turistas procedentes del centro de Madrid y Cartagena. Por eso queremos que se recupere, se electrifique y se convierta en una vía moderna que acabe con el aislamiento de Cartagena”, ha concluido la alcaldesa.