La consultora contratada por el Ayuntamiento para estudiar la retirada de lodos de las playas del sur del Mar Menor -Estrella de Mar, Los Urrutias, Los Nietos y Punta Brava- ha presentado ya un proyecto básico que propone la recuperación ambiental de esas zonas de baño actuando en seis fases que se extenderían durante ocho meses y están valoradas en un millón de euros.
Las primeras actuaciones serán dos experiencias piloto en la playa de Estrella de Mar en las que se ensayarán dos métodos de recuperación de playas, según ha informado esta martes, 1 de agosto, la alcaldesa, Noelia Arroyo, que ha comparecido ante la prensa, junto a Juan María Vázquez, titular de la consejería de titular, de la consejería de Medio Ambiente, Mar Menor, Universidades e Investigación, que ha financiado la redacción del proyecto; y el biólogo y jefe del departamento de planificación ambiental del Ayuntamiento de Cartagena, Antonio Sansano.
El trabajo de la empresa, la UTE formada por la consultora ambiental Tecnoambiente y la ingeniería MC Valnera, también incluye un Estudio de Impacto Ambiental que ya ha sido remitido a la Demarcación de Costas para su informe. Esta empresa cuenta con experiencia en la recuperación de zonas degradadas y ha actuado recientemente en la Ría del Burgo, en A Coruña, o con la Autoridad Portuaria de Huelva para el tratamiento de fangos contaminados.
En las diez zonas propuestas se ha valorado la aplicación de hasta doce procedimientos diferentes, desde la retirada manual hasta el uso de la watermaster y se ha propuesto para cada caso la metodología que se considera más eficaz y con menor afección al medio.
Explicado Arroyo, “los pasos siguientes son, en primer lugar, obtener permiso para hacer la prueba piloto. Estimamos que esta prueba nos costará unos 70.000 € que ya estamos buscando para poder desarrollarla este mismo invierno, que es la época del año en la que reduce al mínimo el riesgo de impacto sobre el medio. Paralelamente, gestionaremos la aprobación del estudio de impacto ambiental, que es un trámite más largo. Una vez aprobado, sacaremos a concurso ejecución del proyecto de retirada de lodos que, como he dicho, está valorado en algo más de 1 millón de euros”.
La alcaldesa ha informado de que se dirigirá al Ministerio de Transición Ecológica para que financie esta operación ya que la retirada de secos y fangos forma parte de las de los objetivos prioritarios marcados inicialmente por el propio ministerio en el Plan para la Protección del Borde Litoral.
El consejero en funciones de Medio Ambiente y Mar Menor, Juan María Vázquez, por su parte ha señalado que este proyecto de eliminación de lodos es un claro ejemplo de "colaboración entre administraciones. En este caso, entre el Ayuntamiento de Cartagena y el Gobierno regional". Y que este trabajo parte de un "estudio científico, realizado con un exhaustivo trabajo previo, desde las batimetrías hasta la caracterización de los sedimentos, para entender las particularidades de cada una de las zonas y a partir de ahí, preparar el proyecto y avanzar en las intervenciones".
Arroyo, por otro lado, ha explicado que la propuesta establece ocho meses de trabajo en seis fases que están diseñadas como una cadena de aprendizaje. Para avanzar con seguridad y no cometer errores se plantean actuaciones que se realizarán de forma consecutiva para ir confirmando que se cumplen los objetivos y Estrella de Mar será el escenario de las pruebas piloto de eliminación de lodos que se aplicarán en las playas cartageneras. En una zona de la playa se ensayará la recuperación mediante cubrición con arenas, mientras que en otra se aplicará un sistema de succión y lavado que permite la separación de fangos y arenas.
El biólogo y jefe del departamento de planificación ambiental del Ayuntamiento de Cartagena, Antonio Sansano, ha indicado que "una vez realizados todos los estudios, los elegidos son los que tienen un mayor criterio ambiental; criterio que ha primado sobre el económico y técnico"
Reducción de lodos
El estudio de las diez zonas propuestas por los técnicos municipales ha permitido comprobar que la superficie ocupada por lodos se ha reducido globalmente en un 40% entre los años 21 y 22, de casi 20.000 m2 a 12.000. Los técnicos asocian esta evolución a que el trabajo intensivo de retirada de algas ha permitido que dinámica del mar haya actuado con más eficacia.
De hecho, de las diez zonas inicialmente incluidas en los planes se han eliminado a efectos de actuación tres, aunque seguirán en observación durante todo el proceso. Por contra, se han apreciado mayores acumulaciones en dos de los puntos estudiados.
Hay que recordar que las zonas de acumulación de fangos no solo afecta a la seguridad del baño, sino que pueden generar episodios locales de anoxia que afectan a la calidad del agua, a la flora y la fauna.
El consejero del Mar Menor también ha indicado en la comparecencia que a día de hoy "siguen trabajando brigadas de hasta 100 personas retirando biomasa en las playas del Mar Menor, para que las playas estén listas, y esta biomasa no se convierta en lodos". En el presupuesto regional para este 2023 hay dedicados más de 11 millones de euros en la retirada de biomasa.