El nuevo servicio de extracción de biomasa puesto en marcha por el Ayuntamiento de Cartagena ha extraído 112 toneladas de algas, lo que supone una media de 1 tonelada diaria desde el pasado mes de agosto en las playas del Mar menor. Estas labores se extenderán entre los meses de marzo y noviembre en los próximos años, según las previsiones del plan de mantenimiento para los próximos tres años preparado por el Ayuntamiento, según ha explicado este martes 20 de diciembre la alcaldesa, Noelia Arroyo, en la reunión del Foro de Coordinación Interadministrativo del Mar Menor, reunido en San Javier.
El Plan, que debe ser aprobado por Costas, establece el calendario, los sistemas y las áreas para las tareas de limpieza ordinaria, la extracción de algas, el control del carrizo y el remangado de playas, una operación que permite recuperar y reponer la arena desplazada desde la playa por efecto de los temporales y reduce la aparición de secos.
La alcaldesa ha explicado que “ha sido necesario incorporar a las labores estructurales soluciones a problemas que se han agravado por el alto nivel del acuífero, que es responsable tanto de la proliferación de zonas con cañas en playas urbanas, la biomasa, así como del desplazamiento de arena hacia el interior del mar en algunos puntos”, y ha coincidido con el consejero de Medio Ambiente, Antonio Luengo, en reiterar al Gobierno de España la urgencia de “adoptar medidas que aseguren el funcionamiento del bombeo del Albujón de manera permanente para evitar la entrada de agua al ecosistema”.
Para el remangado, el Ayuntamiento propone 8 sectores de actuación, 2 en Punta Brava, El Caletón en Los Urrutias, Los Nietos, Mar de Cristal y 3 en playas de La Manga (La Gola, Playa Chica y Golamar).
Para la retirada de carrizo, se fijan 8 zonas que suman unos 1.500 metros cuadrados en los que se vigilará el crecimiento de las cañas, que han proliferado por la presencia cerca del mar de agua dulce procedente del freático. En los dos últimos meses se han limpiado 16.000 metros de carrizo.
El calendario de trabajo fija la retirada de biomasa de marzo a noviembre; la retirada de carrizo cada dos meses y limitar el remangado a los meses más fríos y con menos incidencia sobre el ecosistema, que son los tres primeros meses del año.
Según el plan, el servicio regular de limpieza será semanal entre noviembre y febrero; diario en los meses de verano y de cuatro veces en semana durante el resto del año.
La alcaldesa ha insistido en la importancia de seguir actuando en la retirada de biomasa, que reduce el aporte de nitrógeno y fósforo al Mar Menor. Desde el Gobierno de la Región, el consejero ha anunciado que en 2023 se destinarán 11 millones de euros para dar continuidad a los trabajos de retirada de biomasa y ova en el Mar Menor, “lo que contribuye al mantenimiento del ecosistema y reduce el riesgo de sufrir nuevos episodios de crisis”. Unas tareas que solo en 2022 han permitido retirar 26.054 toneladas de biomasa, lo que ha supuesto la extracción de 411 toneladas de nitrógeno y 14’50 toneladas de fósforo.
Arroyo ha explicado igualmente, que sigue avanzando el desarrollo del contrato para el proyecto de retirada de fangos y secos. Está en fase de revisión por parte de la dirección del contrato la documentación ya entregada sobre la actualización del estado de la zona de estudio, la caracterización de las zonas de baño y sedimentos, y los estudios para la regularización y estabilización del perfil de playa. Paralelamente se ha comenzado con los trabajos para la Fase 2, de estudio de alternativas.