El PP denuncia que la Intervención municipal puso 149 reparos al pago de 7 millones de euros en facturas en 2017

 13 dic. ’18. El grupo municipal Popular ha votado en contra de la aprobación de la Cuenta General del año 2017 porque los datos aportados reflejan el descontrol y la mala gestión del Gobierno de López y Castejón, “un Gobierno que no ejecutó las obras prometidas a los vecinos en el Presupuesto, que no tiene aún aprobadas las cuentas de la sociedad Casco Antiguo y que ha asfixiado a las empresas que se juegan su futuro y el de sus familias”, ha denunciado la concejal Esperanza Nieto.

En la Comisión de Hacienda e Interior, Nieto ha pedido explicaciones al Gobierno sobre “los 149 reparos que la anterior Interventora del Ayuntamiento puso al pago de 7 millones de euros en facturas porque ni López ni Castejón fueron capaces de renovar los contratos a los empresas que prestan servicios en el Ayuntamiento”.

Ante esto, la concejal popular ha criticado que “tanto López como Castejón tuvieron bloqueados en 2017 la renovación de los contratos más importantes del Ayuntamiento como energía eléctrica, de alumbrado público, del servicio de grúas, de mantenimiento, de limpieza de colegio y de los servicios postales. Empresas que tuvieron que esperar una media de seis meses para cobrar su trabajo”.

En el informe de la intervención, dice claramente que “el pago de estas prestaciones realizadas sin crédito presupuestario constituyen una falta muy grave”. Sin embargo, este Gobierno ha continuado pagando facturas a pesar de las advertencias de la Intervención municipal.

Nieto ha expuesto en la Comisión que existe una gran diferencia entre el número de reparos que puso el anterior interventor con respecto al actual. Ahora entendemos por qué Castejón se quitó a la anterior interventora y colocó a uno de su cuerda política, para poder garantizar que, a través de las Juntas de Gobierno, podía hacer lo que quisiera, aunque ello suponga hipotecar el futuro de los cartageneros.

Nieto ha insistido en que “el Ayuntamiento es un caos por la incapacidad de dos partidos que se unieron con el único objetivo de ocupar el sillón de la Alcaldía y colocar a los suyos, pero que se olvidaron de su promesa de dar estabilidad al municipio. Hemos perdido cuatro años que serán muy difícil de recuperar”.